Una historia de heroísmo, valentía y rescate con Yo Buceo. ¡No te pierdas esto! Ese día, Raúl y su equipo salían del puerto a las 10 de la mañana. Estaban dando el aviso al Cartagena Port Control de los pasajeros, destinos y hora de retorno. Instantes después se notificó por radio al mismo canal 12 que se había volcado algo en la dársena del puerto. 

El equipo ofreció su ayuda a Port Club, a lo que contestaron que por favor se acercaran, sin más instrucciones. Así comienza esta historia que en este artículo hemos preparado para ti, en el blog de Yo Buceo

Un barco ‘empujadora’ de la Armada se hunde en el Puerto de Cartagena.

Yo Buceo rescate 2

El pasado martes, 07 de julio, un barco “empujadora” de la Armada se fue a pique sin daños personales en la Dársena del Puerto de Cartagena. Este hecho ocurrió cuando la embarcación operaba tratando de llevar un barco militar más grande sin éxito.

El equipo de Yo Buceo al llegar, vieron algo que se hundía. Alguien desde la fragata gritó: «Hay alguien todavía dentro», lo que encendió sus alertas. Buceadores y staff del centro Yo Buceo se dispusieron a organizar el rescate, liderado por Raúl, patrón del mismo.

Las instrucciones eran muy claras: «Hay una víctima y no quiero más», dijo Raúl y sin más palabras se lanzó al agua. Este, le dice a Antonio Rey (Antony King para los amigos) que sea su pareja y que no se despegue de él. Al no ver claro donde estaban y solo tener una oportunidad para el rescate, decidió asegurar y dirigirse a la fragata, que tenía una «estacha», para descender por ella y no fallar.

Comienzan el descenso con Antonio, por la estacha, y encuentran el barco a 20 metros de profundidad. Pero no se ve nada, por lo que tienen que identificar rápidamente la patronera. Para entrar y sacar a la víctima, quién podía estar inconsciente tras 5 minutos sumergido. Raúl consigue las ventanas y procede a intentar entrar, primero rompiendo una y luego por otra abierta. 

Al meter la cabeza en la patronera, observa al hombre fuerte, consciente y buscando una salida. La desesperación, entonces, se convierte en la alegría y esperanza que lo lanzan hacia él. Coloca su regulador secundario en la boca de este y este comienza a respirar normalmente, empezó a relajarse.

Un rescate que terminó de forma maravillosa y compartimos en Yo Buceo.

Yo Buceo rescate 3

«Pensaba que alguien o algo dirigía ese momento. Ese hombre hombre se ha comportado como nadie he visto en esa situación. Ha cerrado los ojos, se ha sujetado a mi donde le he puesto las manos, en mi chaleco para que sintiera sujeción y confianza, y hemos ascendidos seguido por mi compañero, siempre atento, hasta la superficie.»

Esto es lo que cuenta Raúl, nuestro experimentado submarinista que sintió al consolar al hombre mientras se dirigían a la superficie. Increíble, suerte, gracia, eso no lo sabremos… Pero desde luego, hoy no era tu día. Nos queda una historia para compartir sobre este rescate.
Sin duda alguna esto habla del profesionalismo y la valentía que nos da una idea de lo que encontrarás en Yo Buceo. Un aplauso para Raúl, ese día salvaste una vida…